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Las aguas medicinales son la base de todo balneario, existen numerosos tipos de agua con particulares características que nos pueden aliviar alguna dolencia en concreto. La diferencia que podemos encontrar con respecto a los spas, por ejemplo es el tipo de agua que en el caso del balneario es de tipo minero-medicinal con declaración de utilidad pública, mientras que en los spas es normal. El balneario nos puede servir para curar alguna enfermedad o prevenirla, los balnearios que suelen estar alejados de las ciudades rodeados de naturaleza y en un entorno de paz, que nos ayudará a sentirnos mejor tanto física como psíquicamente, ya que nos mejorará el estrés, fruto del trabajo diario de una vida ajetreada. Cada tipo de agua de que dispone un balneario que será solamente una, vamos a indicar los tipos de aguas y sus beneficios que pueden aportar para nuestra salud, las Sódicas son estimulantes, las Sulfuradas tienen una acción clara sobre la piel, respiratoria y locomotora. Las Radiactivas son buenas para la depresión, ansiedad, estrés, Las Ferruginosas sirven para regenerar la sangre, son útiles para los regímenes de adelgazamientos, las Sulfatadas son diuréticas. Las Bicarbonatadas son efectivas para el aparato digestivo, las Carbónicas son recomendables para aumentar el apetito y el circulatorio, sabiendo los tipos de aguas y sus características y nuestras necesidades deberemos elegir uno u otro.
